miércoles, 29 de mayo de 2013

Siete vidas tiene un gato...

Mal momento elegí para retomar mi blog. Y es que la vida me ha dado otra puñalá, como decimos por aquí. Y ya no me acuerdo de cuantas llevo ya. Pero lo que si me estoy dando cuenta que el circulo se va estrechando. Y no se si me van a quedar mas vidas para aguantar otra.
Esta puñalá, trapera, me ha dejado bastante tocado. Me ha pillado desprevenido, por la espalda y con alevosía. No me la esperaba, bueno ninguna se espera, me ha entrado por un costado y se ha acercado a pocos centímetros de mi corazón.
Tal vez no haya sido la mas mortífera de las que haya recibido, pero de la forma y como se ha producido, si es de las mas dolorosas.
De la primera, la mas mortal de todas, pude reponerme gracias precisamente a eso, a que era la primera. Y aunque parezca mentira, la ignorancia y la fuerza de la niñez, supieron curar las heridas, aunque la cicatriz por mas que quiera permanece indeleble en el tiempo.
Las siguientes puñalás, aunque también dolorosas, se puede decir que fueron inevitables, fueron incluso ley de vida, y que tarde o temprano te la tienen que dar, tal vez por eso tus heridas desaparecen antes o por lo menos duelen menos.
Ya llevo tres. Creo que demasiadas para la altura de vida en que me encuentro. Pero por lo que veo no deben de ser suficientes. Y me vuelven a dar otra. Esta también debería ser ley de vida, pero se adelantó, se adelantó demasiado. Yo creía que no era muy profunda, que las heridas cicatrizarían. Pero no, las heridas se gangrenaron y sin darme cuenta se llevaron otro trozo de mi vida.
La verdad sea dicha, que esta última puñalá trapera no se ha llevado ningun trozo de mi vida, y espero que solo se quede en un simple pinchazo. Porque yo ya no se si me quedan muchas vidas más.
El gato tiene siete vidas... Y el hombre?... Cuantas vidas tiene un hombre?



1 comentario:

Anónimo dijo...

ÁNIMO